Nos falta el rapport para desatar el nudo gordiano
La difícil situación por la que está atravesando el país, más allá de un modelo desarrollo que resuelva los problemas sociales y las microfinanzas de muchos hogares y empresas, está en nuestro propio talente.
Bien lo dijo el saliente Comisionado de Paz Miguel Ceballos en
nota publicada en el diario Vanguardia el pasado domingo 23 de mayo, que el
país está jugando a dos caras de la moneda, en una está Uribe y en la otra está
Petro, y con esa división es muy difícil llegar a acuerdos.
Esos acuerdos son necesarios para superar los tragos amargos
de un mes de paros, bloques y vandalismo, que lo único que están logrando es
ahondar el odio entre los colombianos, empobreciendo a aquellos que viven del
diario y a miles de emprendedores de mipymes que vienen con el lastre de un año
difícil tras la pandemia.
Pero que en lo visto en este mes de crisis hace falta que se
implemente la metodología rapport en cada bloque que están sentado en la
mesa de negociación.
El rapport como explica Arturo Torres en el portal psicologiaymente.com
(https://psicologiaymente.com/psicologia/rapport-ambiente-confianza),
es “el entendimiento compartido y empático de las diferentes perspectivas
desde la que uno mismo y la persona abordan un problema que debe ser
solucionado por ambos.” En otras palabras, es la capacidad de crear empatía
poniéndose en los zapatos del otro, para que, con base en el método de
negociación de Harvard, propuesto por William Ury, Roger Fisher y Bruce Patton,
se lleguen a acuerdos sustentados en un gana-gana, caso contrario a lo qué nos
esta pasando hoy. Estamos en una negociación en la que todos perdemos.
Dice Arturo Torres, que para crear el rapport se deben
tener en cuenta:
1. Coordinación (mirriring): consistente en “adaptarse
al ritmo de otra persona tanto gestualmente […], oralmente […] y sobre todo
emocionalmente […]”
2. Reciprocidad: se basa en al escucha activa
para poder encontrar formas de retroalimentar los aportes realizados por la contraparte,
ya sea en acciones u oraciones.
3. Lugares comunes: consiste en focalizar los
mensajes y las acciones a temas convergentes que sean de interés para las partes
interviniente.
La ambientación anterior, contribuye a que se genere un
clima de confianza, empatía y sobre todo de una comunicación clara.
Igualmente, allí se plantean 5 pautas para crear un buen rapport
1. Ser conscientes de la importancia de la primera
impresión.
2. Hacer que el lenguaje no verbal y verbal casen entre
sí.
3. Formular enunciados sin ambigüedades.
4. Poner a pruebas la calidad del rapport. Consistente
en que las partes pongan a prueba el proceso, sea, por ejemplo, modificando el ritmo
de la conversación, con la finalidad sí es imitada o no.
5. Hacer autocrítica frecuentemente. Con la finalidad
de autoevaluarse sí el proceso se está desarrollando bien y encaminado al logro
del objetivo propuesto en la negociación.
Esperemos que, en esta semana en la que se cumple un mes de
anormalidad, las partes pueden llegar a mínimos que desate el nudo gordiano en
el que estamos enredados y se pueda reactivar la economía de sustento para
todos los colombianos.
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